Cuando la persona crece, mayor es su resistencia a la Palabra de Dios, y de esta manera resulta mas difícil ganarlo para Jesús.
Este rechazo hace que su corazón se endurezca (Hebreos 4:7).
Por esta razón la niñez y la adolescencia son la mejor etapa para ganar un niño para Jesús.
Hay hombres de Dios que hoy día están a frente de una Iglesia y que empezaron el camino de la Fe en su niñez. Mire la importancia de su trabajo Educadora.
Los niños y sobre todo los mas pequeños son muy distintos a los adultos. Ellos tienen mayor facilidad para aprender, son abiertos y demuestran interés. El grupo mas receptivo es el grupo de los niños, sobre todo el de los mas pequeños. Muchos de ellos desean escuchar la palabra de Dios y con seguridad hay entre ellos quienes desean verdaderamente confiar en el Señor Jesús.
Antes que un adulto sea salvo, debe volverse como un niño. La salvación no requiere que un niño se vuelva como un adulto. Pero sí que el adulto se vuelva como un niño. Para el adulto esto es muy difícil pero para el niño no lo es.
Dios puede usar todas estas cualidades naturales del niño para que éste pueda llegar a la Salvación, sin que ellos tengan que pasar por todo lo que un adulto pasa, e incluso es un enorme potencial de ser un instrumento en las manos de Dios.
Por esta razón es que ahora es el momento de alcanzarles, ahora que son receptivos, y están para escuchar y recibir todas las enseñanzas. Crear una nueva generación. Ellos están abiertos a todo. Incluso también al pecado. Mucho daño están haciendo a sus hijos aquellos padres que no buscan a Dios y no consiguen educar a sus hijos.
Por esta razón educadoras, no podemos parar con la Evangelización, porque esto es muy importante para ganar las almas de los niños para Jesús.
. EBI CAPIATÀ
EBI HERNANDARIAS
Ebi CDE.
No hay comentarios:
Publicar un comentario