Generalmente lo primero que hacemos en la clase en la primera oración ¿No es así? Pero nuestra oración debe comenzar mucho antes del inicio de nuestra clase, voy a darles algunas ideas que me ayudaron a tener la dirección del Espíritu Santo, hacer una clase más atractiva y espiritual. Y también a hacer crecer el trabajo, pues el número de niños que hoy hay en mi clase ¡creció mucho!
Cuando usted vaya a planear lo que va a hacer con los niños debe hacer una oración pidiendo a Dios sabiduría y dirección, para que todo lo que haga sea en Espíritu.
Prográmese para llegar al menos 15 minutos antes. Así puede hacer una oración dentro de la salita si es posible también con la auxiliar o con las otras educadoras que quedaren en la EBI (claro que si no fuera posible por causa de algún imprevisto, no hay problema, lo importante es estar en espíritu de oración).
Y hacer un propósito de oración a su criterio por la vida de los niños, para amarrar el mal que impide que ellas lleguen a la iglesia, que las hace rebeldes, desobedientes, etc.
Solo cuando nosotras, las educadoras, vivimos en esa fe es que podemos pasar para los niños la importancia de la oración. Incentivándolas a orar no sólo dentro de la iglesia, pero también en casa, cuando despierten, antes de dormir, antes de las comidas.
Hay innumerables recursos, dinámicas y actividades que usted puede hacer con los niños para incentivarlas a orar, pero hay un punto importante que me gustaría resaltar hoy: Comience por usted el cambio que tanto desea ver dentro de la EBI.
¿A los niños de su iglesia no les gusta orar? Comience usted a orar por ellos, haga un propósito y pida a Dios la dirección que debe seguir.
¿Ellas creen que el momento de la oración es aburrido y tedioso? Haga algo que llame la atención de ellas, algo que haga ese momento ¡el mejor de la clase!
¿A ellos no les gusta buscar el Espíritu Santo? Explique la importancia de ese momento, que cuando buscamos a Dios la alegría que sentimos dura mucho más de que la alegría que el mundo ofrece. Lleve un radio con canciones y fondos musicales para ese momento sea ¡más que especial!
Cuando entregamos nuestras vidas en las manos de Dios, todo fluye naturalmente y cuando menos esperamos ¡algo increíble sucede!
Espero haberlas ayudado, luego volveré con más ideas de actividades para los pequeños.
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